sábado, 7 de mayo de 2011

Siderar y las presiones de "guante blanco"



A partir del conflicto, que actualmente se desenvuelve en estrados judiciales, entre Siderar y el Gobierno, ya se visualizan distintas presiones o lobbys que intentan dar una salida "negociada", con la intención menos explícita de disciplinar al Estado para que no pueda hacer valer atribuciones legales en el ámbito privado de las empresas.


Primero se utilizó un argumento que podríamos llamar financiero.

Cuando el Estado asumió el control de los fondos que administraban las AFJP a través de ANSeS, las inversiones que éstas habían hecho se encontraban devaluadas como producto del contagio por la crisis financiera internacional que ponía a todos los tenedores en posición vendedora, sin que ningún inversor se animara a comprar.
Las acciones de Siderar no escapaban a la regla y su valor técnico (cálculo que indica a cuánto se vendería la acción en el presente) era muy bajo. Con la salida de la crisis, el precio se fue recuperando.

Esto es: la ANSES adquirió barato. Si hoy vendiera, cristalizaría una diferencia muy interesante.
Así, los mismos gerentes de Ternium (grupo que pertenece a Techint y que controla la mayoría accionaria de las empresas del holding dedicadas a la producción de acero) salieron a manifestar su disposición a comprar a buen precio el paquete accionario en manos de ANSeS.

Te pagamos lo que valen las acciones, y te dejás de joder. Harías un buen negocio. Nuestros jubilados se lo merecen. La presión indirecta, a través de la opinión pública preocupada por la plata de ANSeS, era un objetivo.

Ese parecía ser el mensaje.
Que no explicó nunca sin embargo por qué la ANSeS tenía que renunciar al derecho de seguir haciendo rendir sus inversiones, dejando de cobrar dividendos, o viendo de afuera cómo las acciones recién liquidadas subirían de precio gracias a los buenos rendimientos de Siderar en el negocio de los tubos sin costura, insumo esencial para la industria petrolera.

O sea, el elemento fundamental del mismo juego del mercado de capitales del que se valen las empresas para financiarse, esto es, la libertad para comprar, mantener en cartera y vender cuando se le antoje al inversor, que tanto valoran, debía suspenderse específicamente en el caso de ANSeS, que no tenía derecho al negocio de la "especulación" con valores. Doble vara.

Después se pasó a una extorsión un poco más compleja.
El directorio de Siderar, en la misma asamblea en la que rechazó la inclusión de Axel Kicilof como representante de ANSeS, que está siendo cuestionada en la justicia y que es considerada nula actualmente, había decidido pagar dividendos por 1.500 millones de pesos. ¿Cómo el Estado, que iba a cobrar una suma mayor a los 300 millones en ese concepto, podía oponerse a que se hiciera ese pago?

La presión ahora, se ejercía indirectamente a través de la opinión pública preocupada por la plata de los jubilados, y de los accionistas menores de Techint, que ante el congelamiento del pago de dividendos se quedan momentáneamente sin cobrar.

Bueno, la explicación de por qué el Estado actúa así podría ser ésta: cuando se aprobó el balance 2010, se depositaron en la cuenta resultados no asignados, una parte de las utilidades obtenidas en el ejercicio. Esto es perfectamente normal. Después, el directorio, en asambleas sucesivas, puede ir definiendo a qué asigna esos resultados: puede pagar dividendos, retener como reservas, ampliar capital, o dejar pendiente de asignación.
Resulta que Siderar acumula, de ejercicios anteriores, una suma de casi 7.000 millones de pesos de utilidades no asignadas.
Se sospecha que esas reservas pueden emplearse para fugar divisas, por ejemplo. Es sintomático que los "especialistas" digan que esa plata no puede haberse acumulado sin decidir su movimiento, ya que sería una maniobra financiera absurda, de descapitalización. O sea, sin invertir, la plata cada vez vale menos, por lo cual es casi imposible que esos resultados no asignados acumulados no hayan sido invertidos de algún modo.

Otra de las cuestiones que está bajo sospecha en el caso de todo el holding Techint, es el desvío de utilidades obtenidas en Argentina, para hacer ampliaciones de capital o inversiones directas fronteras afuera.
Clarín dice hoy que "bancos de inversión" le habrían recomendado a Paolo Rocca que aumente sus inversiones en el extranjero, y no en Argentina.

El mensaje, es otra forma de presión hacia el Estado argentino: "nos podemos llevar la plata".

4 comentarios:

Contango dijo...

Excelente Mariano.

Alexis dijo...

Me permito una corrección. Sepa disculpar.
Siderar no produce tubos sin costuras, esa es Siderca o Tenaris. Lo que produce Ternium es aceros planos (chapas) con principales clientes las industrias automotrices y de electrodomésticos.
Aparte de esto, muy interesante lo que escribió, es difícil encontrar análisis como este en los medios tradicionales de comunicación. Muchas gracias!!

Mariano dijo...

Tenés razón, Alexis.
Error mío.

Gracias. Un abrazo

Contango dijo...

Aporte:
Los Muchachos de Techint organizaron dos grupos controlantes y acomodaron sus empresas según su producción en Ternium y Tenaris.
Ternium=(62% Grupo Techint)+(11% Tenrais)+(2% Ternium treasury share)+( 24% FLOTING RATE)
Siderar= (61% Ternium)+(5% PPP -trabajadores)+( 34% FLOTING RATE )
Saludos.