domingo, 10 de octubre de 2010

Internas: el kirchnerismo decide qué fecundidad tendrá su legado

Es dura con las aspiraciones presidenciales de Scioli la nota de Verbistsky de hoy.
Tan dura, que hasta viene a confirmar que tal aspiración existe. Y (según mi modo de entender las operaciones de Verbitsky) que es una de las cartas que tiene guardada Kirchner.

Das Neves y De Narváez ya anticiparon la jugada, supongo que tratando de provocar los cortocircuitos que entorpezcan la unción armónica de Scioli como heredero de Kirchner, y buscando de algún modo que la inevitable candidatura del motonauta se instale, al menos, en disputa con Kirchner desde un espacio al que incluso ellos puedan subirse en posición expectante.

El problema para ellos no es Kirchner (al que en serio consideran derrotado), sino parte de la tropa, que va a querer colar. Ni Macri, ni De Narváez tendrían problemas en compartir armado con Scioli. Si lo tienen, por ejemplo, en compartirlo con Moyano o, qué se yo, Milagros Sala, digamos.
Más allá de lo descorazonante que pueda resultar esta novedad, hay que estar preparado para tragar el inevitable aterrizaje, el "retroceso" que estas movidas implicarían, que (ojo) se daría de todas formas, y con más fuerza todavía si fuera a través de una derrota resonante, sin negociación posible.

Los desafíos están dados en la contención de las aspiraciones de Scioli, en no cortarle las piernas, y en colarle gente para rodearlo. Moyano entendió bien esta dinámica. El que no la entienda sale de la cancha en donde se disputa poder real, y pasa a la marginalidad de la constituyente social, vuelve a las actividades "estudiantiles" para generar la masa crítica necesaria para crear un proyecto de poder a largo plazo (interminable largo plazo), a la organización de marchas federales contra el modelo neoliberal. Al llano, lisa y llanamente, al llano.

7 comentarios:

Comandante Cansado dijo...

Felicitaciones por el nuevo blo, Mariano. Ya te agregué al blogroll.

Mariano dijo...

Gracias, Comandante.
Un abrazo

rinconete dijo...

Mariano

Creo que si por alguna extraña broma del destino, Scioli fuera nuestro próximo presidente, las chances de controlarlo a través de un cerco serían tan exiguas como las chances de Duhalde de controlar a Kirchner a través de Pampurro, Aníbal Fernández o Lavagna.

Si el candidato del kirchnerismo fuera Scioli, sería para el oficialismo una manera de perder sin siquiera esperar las elecciones.

Una presidencia de Scioli, con poder discrecional y sin un zapato K en la cabeza, tendrá para el oficialismo actual el mismo destino de llano que tuvo para Duhalde Kirchner a partir del 2003.

Saludos,
r.

Anónimo dijo...

le vamos a entregar a scioli años de trabajo por un gobierno popular y nacional ?? NO CUENTEN CONMIGO , MI VOTO NO ES POSITIVO PARA SCIOLI A OTRO CON ESE PERRO!!!!

Federico dijo...

Asi no habra legado. De la misma manera que Scioli acabo en dosminutos con la reforma arslanian, acabara en 4 días con todo lo que no le va del Kirchnerismo. Pelearla de adentro?: opcion encomiable para los intendentes del conurbano, para los camioneros. Si cabndie hace lo mismo lo uico que estaria resguardadno es su sillita. Los qu eno tenemos intereses ahi, ya que estamso en el llano, volvemos a la calle. A tirar piedrazos.

il Postino dijo...

ese escenario es distinto si el gobernador de la provincia de Buenos Aires es Kirchner. Otro tema es la conformación de las listas para senadores y diputados. Porque sin dudas la primera minoría será K, si el armado es menos aparatoso y más ideologizado, el kirchnerismo garantiza que será un actor político fundamental hasta 2015. Pero el costo de eso... puede ser muy aaaaalto...

Anónimo dijo...

Tres intiresno, gracias