miércoles, 6 de octubre de 2010
Se las puso de nuevo...(en realidad, nos la pusieron)
Anoche, en medio de una particular situación, escribí lo que sigue:
La Corte decidió no revocar la cautelar que suspende la aplicación del artículo 161 de la Ley de medios. Paralelamente, recomendó que la medida cautelar no se prorrogue indefinidamente. Es decir, que se resuelva rápido la cuestión de fondo: si es constitucional o no el artículo 161.
Esa causa está en manos de un juez de primera instancia. Defina éste como defina, se habilitarán las instancias de apelación. Primero Cámara, después la misma Corte.
Atención: casi seguramente la Corte tendrá que definir de una vez y por todas sobre este asunto.
En estos días, asistimos a una escena reconocible: el kirchnerismo creando su enemigo. Casualmente, la Corte. El Poder Judicial. La sensibilidad del tema hizo que los medios de comunicación involucrados no pudieran desistir de remarcar el "enfrentamiento".
La decisión de la Corte es saludada hoy, de manera casi efusiva, por todos los que valoran la independencia del poder judicial. Esa republicana independencia expresada tan claramente hoy, en el fallo de la Corte.
Decíamos: la Corte independiente será quien seguramente tenga que definir el diferendo sobre la cuestón de fondo. Que es la que constituye el último escollo para la plena vigencia de la Ley de medios. Esa Corte, que tan estoicamente resistió las presiones del kirchnerismo, y terminó, hoy, fallando en su contra.
Tendrá dos opciones: definir "a favor" de Clarín, o definir "a favor" del Gobierno.
Si vota a favor del Gobierno, ¿podrá alguien deslegitimar el voto, diciendo que el Poder Judicial no tiene independencia?
Pienso en el discurso de Hebe de Bonafini, tan discutido en estos últimos días, y repito en voz baja: barrilete cósmico, ¿de qué planeta viniste?
Me dio vergüenza la ingenuidad del razonamiento, y por eso decidí sacarlo. Los compañeros Sanin y JP, me hicieron notar que el problema central está en los tiempos. La Corte, con este fallo, mantiene la dilación que estratégicamente buscaron los abogados de Clarín. Para definir, muy probablemente, después de las elecciones del año que viene. Se puede pensar que hay dos resultados posibles: gana Kirchner en 2011, el 161 es constitucional. Gana la oposición, el artículo será claramente inconstitucional, y el expediente se perderá en medio de un trámite legislativo que tal vez termine modificando muchas otras cosas de la ley, con la sanción de otra nueva.
La "independencia de la justicia" y la necesidad de que funcionen las instituciones de la República son un lindo verso para recitar en el comité, y nada más.
Todo parece depender del resultado en el 2011. En política, como en el fútbol, lo único que importa son los resultados.
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3 comentarios:
El tema es cuando tendrá que definir la Corte. Porque si estiran (como pienso que van a hacer) la decisión hasta despúes de las elecciones del año que viene, si el oficialismo pierde se termina ahí mismo la posibilidad de que se democraticen los medios efectivamente.
Espero que podamos seguir sumando gente para apoyar al gobierno, para apoyar esta ley antimonopólica y para ganar el año que viene.
Saludos,
JP
Está bien el planteo: finalmente, la Corte deberá definir sobre “la cuestión de fondo”. Y Hebe, atacando a los jueces con los “tapones de punta”, generó condiciones de credibilidad para una fallo finalmente favorable al Gobierno. Pero: ¿cuándo?
Una acotación sobre la tipografía de los comentarios: me cuesta leer. ¿Seré yo?
Un abrazo.
muy dicotomico mariano.
no veo q gane el k-ismo y la corte vote a favor. Q cambio?
Si q si viene alguien mas moderado pueda ponerse en duda lo logrado. Pero seria un error del opositor q gane.
O ya le habria hecho la concesion habitual de los gobiernos.
Ojala q caiga de una santa vez!
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