jueves, 15 de marzo de 2012

Pobreza, estadísticas, tipo de cambio (título demasiado pomposo para desarrollo tan cortito)


Ponemos a consideración de nuestros escasos lectores, que por lo general despotrican contra los bancos de inversión y las consultoras financieras, el extracto de un mail recibido en el cual se valora como corresponde el esfuerzo por lograr un mundo mejor que hacen estas entidades:

"...tampoco hay que creerse el verso de que el mundo de las estadísiticas es fantástico. La forma en que se confeccionan las estadísiticas, de cómo se decide medir, es ideológica. Por ejemplo, medir pobreza por nivel de ingreso. Si una familia cobra menos de 600 dólares es pobre. Y si cobra 601 ya no lo es.


Así, por ejemplo Brasil, cada vez que el Real aumenta un centavo en relación al dólar saca de la pobreza a millones de personas.


Que ni se enteran, y siguen sin agua, sin cloaca, sin gas natural, sin luz eléctrica a veces. Ni hablemos de teléfono, celular, Internet o pavimento. Pero “el ingreso de divisas para realizar inversiones en activos brasileros aprovechando la alta rentabilidad en dólares de los mismos incide en el mercado cambiario elevando la cotización del real”.


Y entonces el que tenía un ingreso de 1300 reales para mantener una familia de 4 personas, ahora cobra más de 600 dólares. Ya no es más pobre, evidentemente.


Ayer sí, pero hoy no. Gracias a las inversiones especulativas para maximizar ganancias arbitrando con las tasas de interés y las variaciones cambiarias. Muchas gracias señores del JP Morgan y la Goldman Sachs por sacar a tantos niños brasileros de la pobreza."

Para finalizar, no quisiéramos olvidarnos de Ben Bernanke (foto) y sus tasas de interés mínimas y sus políticas monetarias laxas con las cuales se financian los déficit públicos estadounidenses (y se elevan las cotizaciones de los commodities), sin cuya inestimable colaboración este milagro tercermundista no sería posible.


3 comentarios:

Juan Ignacio Visentin dijo...

Con las estadísticas en general (y el INDEC en particular) no se come, no se educa ni se cura, parafraseando a un ex-Presidente.

chacall dijo...

Entonces el razonamiento inverso, que una devaluación de la moneda, en este caso el real, no generaría pobreza.

Y he leído en este blog que eso es cierto.

Coincido con el espíritu del post (si es que existe tal cosa). O sea creo entender la idea, y coincido. Pero si el billete que tenés te permite acceder a más bienes (en este caso importado) estás teniendo mayor riqueza.

Obviamente, no es deseable este tipo de riqueza si no va acompañada de desarrollo productivo, aumento de la competitividad y de la productividad. La riqueza generada solo por movimientos especulativos, es riqueza pero de muy corto plazo, de un día para otro se transforma en todo lo contrario, cuando los capitales vuelen.

saludos!

Mariano Grimoldi dijo...

En este blog se dicen muchas pavadas, Chacall. No es culpa mía si alguien se las toma en serio ;-)

Digamos: son cosas distintas. Una cosa es el poder adquisitivo de los ingresos, que influye en la existencia de pobreza o no. Y otra cosa es la pobreza más ampliada que tiene que ver con un montón de condiciones de vida que no se ven reflejadas solamente por el poder de compra coyuntural de un salario.

Además, digamos que la relación cambiaria en Brasil suele ser demasiado volátil como para plasmar efectos de mediano plazo en la relación ingresos-precios.

Pero sí, la idea pasa más por razonar respecto del absurdo de algunos cálculos, extremando un poco para ridiculizar.

Abrazo.