jueves, 17 de noviembre de 2011

¿El fin de los subsidios?


Primero aclarar un punto: lo único que está confirmado es que se les cobrarán tarifas plenas de gas, luz y agua (con precio regulado, recordamos) a determinados usuarios. Bancos, casinos, principales industrias y usuarios residenciales que viven en countries de todo el país, y Barrio Parque y Puerto Madero en la CABA. Ahorro fiscal calculado (remarcamos: calculado) por recorte de subsidios: un poco más de 4.000 millones de pesos.
Un criterio con casi nulo cuestionamiento.

Un segundo punto a remarcar: el cuadro tarifario sigue vigente. No hay cambios. Solamente los mencionados usuarios quedarán exceptuados de percibir el beneficio de tener subsidiado un 70% aproximado del valor total de las tarifas.

Para el resto de los usuarios (la gran mayoría) se anunció también un programa de acción que va a modificar la relación de los mismos con las tarifas de servicios públicos y los subsidios. El programa se iniciará, con muy buen criterio, con 8 barrios de Capital y GBA, con un PBI per capita muy alto en relación al resto del país.

La idea que desde el gobierno se impone para reformular el enmarañado esquema es virar del criterio de subsidio a la oferta, al inverso de subsidiar la demanda. Focalizar el subsidio, al punto de personalizarlo.
No vamos a hacer valoraciones sobre algo que desconocemos, pero sí vamos a proponer algunos puntos para la discusión:

Primer punto: los subsidios a los servicios públicos nacen, no de la decisión de hacer justicia distributiva, sino de una posición más fríamente macroeconómica. Que consistía en bajar el precio pagado directamente por los usuarios en determinados bienes y/o servicios.
De manera tal que la modificación del contexto, gracias al alto crecimiento y a la recuperación general de la población de su poder adquisitivo en dólares, es lo que lleva al replanteo del asunto. Las tarifas de 2003 son inviables en la actualidad, porque por propio crecimiento de la economía, que implica también aumentos de costos de producción (el salario se cuenta entre ellos), el esfuerzo fiscal para cubrir la diferencia vía subsidios es inmenso.

Recortar subsidios es, entonces, reconocer que ya no se hace necesario mantener artificialmente más bajo el precio de los servicios afectados.
Como todo (llamémosle "derrame" si quieren) en cada intervención hay un efecto multiplicador. La plata que un usuario no gasta en tarifas la destina a la compra de otros bienes, que a su vez implican que al comerciante le aumenten las ventas, de modo que por ahí necesita un ayudante, lo cual hace que una persona que no cobraba sueldo hasta allí comience a cobrarlo, y así...
El recorte de los subsidios generalizado, también provocaría efectos contrarios en este factor multiplicador del que hablábamos.

Sin embargo, vinimos diciendo acá que ya se estaba volviendo más difícil de percibir el efecto virtuoso de las políticas expansivas, porque el poder adquisitivo extra en manos de clases medias y altas iba a aumentos de precios y (directa o indirectamente) a compra de dólares.
Otro elemento, entonces, para desestimar parcialmente el argumento del efecto multiplicador.

Ahora bien, cambiar el criterio de la universalidad por la focalización ya trae aparejadas algunas dificultades. Por ejemplo, en el cálculo de los subsidios a liquidar. Y sobre todo, en las previsiones.
Porque es muy difícil saber por anticipado cómo va a afectar el aumento de tarifas en los consumos de los usuarios, y cómo esto a su vez impactará en la ecuación microeconómica de las empresas, de modo que obtengan algún excedente extra que les permitiría afrontar ellas mismas el subisdio de las tarifas para quienes las necesiten. Un ejemplo mínimo.
Pero también la dificultad para ver de qué modo se disponen y financian las inversiones en infraestructura que permitan sostener el crecimiento diferenciado de la demanda entre los que pagan tarifa plena y los que siguen recibiendo subsidio. Temas muy complejos. Y repito: difíciles de prever. Nada, sin embargo, que no pueda atenderse con trabajo.

Un último punto: discutir en serio si se trata o no de un ajuste es perder el tiempo. Porque se trata casi de una cuestión gramatical.
Acá ya plantamos postura hace bastante: el objetivo de desarmar el esquema de subsidios es mejorar la performance fiscal, corregir el sesgo exagerado de la expansión (en términos ortodoxos). Esa es la realidad, que como se dice habitualmente, es la única verdad.

8 comentarios:

Riki Juarez dijo...

Mariano, que pensas del tema de las tarifas con relación a la competitividad de las industrias? es evidente que algún impacto tendrá en los costos y cual es tu opinión de la competitividad en general, inflación-costos etc... si dejamos de ser competitivos tendremos problemas con el empleo etc.. etc..

Luis Quijote dijo...

Estimo correcta la medida, y comento un par de vivencias:
- Remisero: ¡Nos cagaron! ¡Nos quitan el subsidio y pagaremos mucho más!
Mi respuesta:
- ¿Vivís en un Country, Puerto Madero, Barrio Norte, Palermo o tenés una 4x4?
- No, solo este autito (un Chevrolet 2010 que reemplazó su viejo Renault).
- Entonces NO te jode. A los "negritos" del Conurbano no nos toca.
- La información en TN es distinta. ¿Estás seguro?
.............

Luis Quijote dijo...

Caso 2: Vecino Duhaldista.
- Se acabó el "veranito" para capturar votos. ¡Se va todo a la mierda! Se vienen las subas de precios en todo. Aunque es unavergüenza lo que estamos pagando de luz. ¿O no?
- Para vos sí, que pasaste de tener un Chevrolet 400 del año el'pedo a un Volksvagen 0 Km con un gobierno de mierda, según vos.
- ¡Me lo compré laburando!
- Es cierto, Luis pero, antes del 2003, NO TENIAS ni teníamos trabajo.
- ¿Y...?
- Pensá quien te permitió avanzar. El que dijo "El que depositó dolares..." o quien expresó "no voy a dejar mis convicciones en la puerta". Pensalo.
- No entendí.
- Pensalo. Y vení a tomar mate a casa cuando quieras y lo ampliamos.
===============
Hace 5 días que espero.

Esteban dijo...

Mariano,
me parece que está faltando gradualismo, me parece que falta un plan en serio.
El año que viene van a recortar a todo aquel que no lo necesite en la CABA, cual será el corte? Cuantas micro empresas laburan en las casas de 1 a 5 empleados y si les cortan, echan gente.
Es simple un ajuste de miles de millones de pesos va a impactar negativamente, por el efecto multiplicador, por el acelerador que en nuestro país explica mucho crecimiento y por último afectar la competitividad. (ni hablar de las pujas distributivas que va a desatar un aumento del 200%-500%)
Ojalá prime la racionalidad gradualista.
Un saludo.

Udi dijo...

El ajuste era inevitable, Mariano, varias veces usted lo analizó al tema. Su oportunidad, quizá tarde, pero si la dicha es buena...en fin. Lo importante es quién lo paga. En líneas generales, claro. La sintonía fina, para no cagar al microempresas es necesaria, si, pero inevitablemente posterior, sospecho.
Abrazos !

Eduardo dijo...

Creo que nadie se opone a quitarles los subsidios al tipo que vive en Puerto Madero. El tema es el tipo que vive en Caballito. Decir que la clase media usaba su excedente en compra de dolares, me parece muy tirado de los pelos. En primer lugar, porque el modelo economico actual, no incentiva el ahorro sino el consumo (la clase media tipica mediante el ahorro puede llegar a un auto, jamas a un depto) y en segundo lugar, aun suponiendo que exista una alta capacidad de ahorro de la clase media en dolares, habria que ver como reacciona ente un ajuste. Ahorra menos o deja de ir a comer a un restaurant todos los fin de semana? Ahorra menos o se toma menos taxis? Y ahi hay respuestas para todo tipo. Pero de seguro que va a ver una torta importante que va a priorizar el ahorro y por lo tanto, va a consumir menos.

En momentos donde muchos economistas (incluso oficialistas) preveen un clima economico un poco mas complicado, la quita de subsidios en forma masiva, que todos afirman que "se tenia que hacer si o si", funciona mas como un mecanismo pro-ciclico que podria acelerar una disminucion del crecimiento, si el contexto internacional no mejora.

Mariano dijo...

Eduardo: no es que la clase media salga a comprar dólares.
Pero las empresas que usufructúan el poder adquisitivo de la clase media pueden derivar algo de sus excedentes a la compra de dólares.
Fijate que aclaro: "directa o indirectamente".
En realidad, en mi comentario hay mucho elemento implícito, que se da como sobreentendido, y que no necesariamente todos los lectores pueden sobreentender, porque es muy probable que sean pocos los que hayan leído otros posteos anteriores. Y en eso tenés razón.
La idea implícita, entonces, es que la formación de activos externos (o compra de dólares en general) es, en líneas generales, un mecanismo de ajuste impuesto por el "mercado", o sea, por actores que operan de acuerdo a su propia intención, y que como resultante de esas fuerzas individuales se dan movimientos que potencian las acciones.
Más o menos algo así.
Saludos

el pincha dijo...

como siempre excelente el blog y los post, este 100% de aacuerdo o no.
abrazo