sábado, 23 de noviembre de 2013

Primeras medidas del nuevo ministro de economía, el contador Capitanich

Se envía al Congreso un proyecto de ley para subir la alícuota del impuesto indirecto a la compra de vehículos con valor superior a los 246 mil pesos, del 10 o 12,5% anual al 50%. Esto significa que en el caso de los importados si a la pesificación al cambio oficial del precio del vehículo se le suma el impuesto del 50% da un valor final como si se pesificara a 9,20.

El efecto neto es un tipo de cambio diferencial para este tipo de bienes (aunque el impuesto comprende también a los autos nacionales, ya que por esta vía no se puede discriminar). El objetivo es claramente el desincentivo de la compra a través del encarecimiento.

Quedan comprendidos otros bienes como las motos de 20 mil pesos para arriba, los jets privados y las embarcaciones.

Por otro lado, si bien todavía no se anunció, se espera que se extiendan medidas similares a otros rubros. A un rubro: las compras con tarjeta de crédito en el exterior (es decir, el turismo y las páginas de venta en línea de ropa yanqui o china, con precios de remate aunque con el riesgo asumido por el comprador, sin reclamo, de que te llegue una camisa con una manga más larga que la otra; el acierto marketinero de no llamarse "la salada" convierte a estos shopping virtuales en objetos de veneración por parte de cierta tilinguería, que ni en pedo se iría a comprar ropa -al mismo precio- a la "negrada" de la salada; prefieren, obviamente, comprar en The salad, a igual precio, y si tenés suerte también igual calidad).

Una opción sería elevar del 20 al 40% el recargo por adelanto de impuesto a las ganancias o bienes personales. En este caso, el desincentivo a estas compras estaría focalizado en aquellos cuyos ingresos no hacen que paguen elevados montos de los impuestos susodichos.
La otra variante sería la de limitar el monto a pesificar del saldo de tarjeta. Es decir, si uno compra algo en dólares, puede pesificar sólo una parte de ese monto, el resto lo tiene que pagar con dólares billete previamente depositados en una cuenta en esa moneda. La dificultad de conseguir dólares en el mercado oficial para particulares, se trasladaría entonces a los gastos con tarjeta de crédito, hoy mucho más liberados de otras restricciones.

No están mal estas medidas. Que suponen que queda por el momento enterrado el (cuestionado por el artículo VIII del FMI) desdoblamiento cambiario.
Es difícil defender que no se les cobre más a quienes usan un bien tan esencial como las divisas para atender suntuosidades. El criterio según el cual si un bien se vuelve escaso hay que racionar su uso para darle prioridad a la necesidad más básica es incuestionable, y si se ajusta en base a precios y no cantidades, siempre es mejor, más aceptable por los agentes.

Ahora, el riesgo es la negación de que hay una causa previa que acelera estas demandas.
El tema en la economía argentina es que hay un problema con la demanda de pesos. Los que acumulan excedentes no los atesoran, buscan la fuga.
Todas estas vías que se traducen en salida de divisas no son otra cosa que la esterilización de los pesos que de acuerdo a la matriz distributiva de la renta (que obviamente que es injusta, pero está dada así hoy y ahora), aquellos que tienen capacidad de atesoramiento y apropiación de excedentes logran imponer que están sobrando.

Entonces, para esta situación hay dos salidas: la de corto plazo es buscar mecanismos de absorción de pesos excedentes, esto es básicamente, suba de tasas de interés, recortes de gasto público para limitar las necesidades de financiación del tesoro vía emisión, colocación de instrumentos financieros como letras, notas, bonos, títulos públicos, repos, con tasas atractivas para inmovilizar pesos (lo cual es un elemento de la política respecto de las tasas de interés).
Medidas poco vendibles. Justamente denostadas por nuestras experiencias previas. Sin embargo, hay ciertos elementos a tener en cuenta para recomponer una situación que en 2007 o 2008 era así, sin que a Néstor Kirchner nadie lo acusara de "ortodoxo", ariete de los "organismos internacionales de crédito".

Ahora bien, en el largo plazo, y básicamente como medida preventiva de que las consecuencias de situaciones similares provoquen las mismas restricciones y complicaciones, la decisión más acertada sería una modificación drástica de la matriz distributiva.

Porque los pesos que sobran en algún estamento en otros faltan. Y aún mientras en algunos lugares faltan, el promedio da que en general, sobran. Hay poca demanda de pesos, a pesar de que vastos sectores de la población tienen demanda insatisfecha, no tanto de pesos en realidad, sino de los alimentos que con ellos se podrían comprar, mientras algunos se los sacan de encima comprando cosas innecesarias porque "no sirven para nada".
Ya lo decía un viejo dicho: uno se puede ahogar en un río de 50 cm. de profundidad... promedio. Y de hecho hoy un 20% de la población argentina se ahoga en un mar de pesos excedentes, pero ajenos.

3 comentarios:

Erkekjetter Silenoz dijo...

Muy buen planteo don Mariano.

A mi me quedan las dudas con las tasas de interés, si bien algo por ese lado se hará.

Elevar las tasas dificultaría los créditos para producción más allá que se destinen líneas específicas que parecen insuficientes más cierta reticencia estructural de dichos bancos

A la vez, emitir letras, bonos y lo que detallás debería evitarse que los tomadores de dichos papeles sean exclusivamente los bancos en donde se quedan con la "diferencia" entre el rendimientos de estos y los de los plazos fijos

Saludos

chacall dijo...

Respecto de los autos, leí hoy en la nota de tapa de P12 que afecta lo que es producción nacional (el año que viene estiman que los del segmento D quedan incluidos), por lo tanto tiene otro trade-off, si no lo compensás al precio por algún lado, te afecta trabajo. (si se venden menos C4 y 408 la planta de el palomar puede tener menos demanda de trabajo)

Porque el que compra un 408 o un fluence o un C4, que son de segmento D, a diferencia del qeu compra un Audia A5 (segmento E premium), mira un poco más el precio (y la calidad).

Pero si entiendo que es una buena medida para sin encarecer el dolar encarecer algunos productos, que como planteás, están siendo muy demandados por el excedente de pesos, y porque están baratos debido a que el dolar, ha quedado barato - creo que eso poco a poco se está reconociendo - para nuestra productivdad.

El otro problema que avisoro, es el qeu vos planteás, hoy el excedente de pesos, se va en blue, en turismo, en autos, en LCD, en celulares, y en un monton de cosas que o bien se fabrican afuera, o bien se hacen acá con un costo en dolares altos. Si la idea es que los pesos sigan sobrando, ¿a donde van a ir? ¿Al blue? Si hacés más caro el turismo externo, y aumentás la demanda en el turismo local, ¿los precios en la costa no se te van por las nubes?

Es lo mismo, pareciera haber, que en ciertos segmentos sigue habiendo demasiados pesos en relación al consumo posible.

Por otro lado, los pesos que inyectás en los sectores donde falta poder adquisitivo son pesos con alta propensión al consumo, por lo tanto se gastan, ¿quien se adueña de la renta de ese gasto? El dueño de un comercio o el industrial que después tiene un excedente de pesos y no sabe donde volcar.

El problema emergente es el precio del dolar, el problema de fondo me parece que tiene que ver con la poca madurez que ha alcanzado aún nuestro modelo productivo.

Lo he planteado muchas veces en este blog, y creo que es un problema dificil de atacar, esperemos que estas medidas, que entiendo tienen algun pequeño costo, sean positivas (la de los bienes suntuarios entiendo por los montos que leí en P12 es marginal ).

saludos.

Norberto dijo...

Bueh, off topic, no me gusta resaltar que algunas veces acierto, pero esta es una de ellas

http://www.telam.com.ar/notas/201311/42189-principio-de-acuerdo-con-espana-por-la-compensacion-de-la-expropiacion-del-51-de-ypf.html

recuerdo hab er escrito que era interés de Pemex no quedar excluida de VM, y que los españoles, salvo Brufau, estaban de acuerdo con los mexicanos, y como vemos es lo que parece ha sucedido, afortunadamente para todos.
Nunca menos y abrazos